Quizá un poco tarde, pues las velas empezaban ya a abrirse... y esto debe hacerse cuando están a punto de hacerlo... pero ya le he hecho el pinzado de velas.
Las más largas, a un tercio... las medias, a la mitad... y las pequeñas, no las he tocado.
Ciertamente, lo estoy haciendo en ramas que -si todo sale bien- cortaré en un futuro porque no me sirven para el diseño... pero creo que es bueno que lo haga, porque así practico.
Descubrí con gran alegría... que el injerto realizado el año pasado ha funcionado...!! Y a todas luces parece que se está alimentando de la nueva rama... porque es más grueso en la salida, que en la entrada.
Así que lo he destapado pero -por si acaso- no lo he cortado. Y esperaré al año que viene para hacerlo...
Lo que sí he hecho, ha sido hacer muchos más injertos como éste. Ya que de las tres pruebas con tres sistemas distintos el año pasado... éste fue el único que funcionó.
Si todo va bien, tendré para ramificar el principio de cuatro ramas (primera, segunda, tercera, y trasera).
Así que si el año que viene veo que han funcionado al destapar los injertos... los cortaré -para curarme en salud- para Primavera de 2017. Y para entonces... ya podré cortar todas las ramas que no me sirven... y arrancar -por fin- con el diseño de éste ejemplar que -espero- con los años se convierta en algo realmente bonito...
Entre los que he hecho, y los brotes que ya había... la idea es que cuando pode el resto, el pequeñuelo quede con cuatro ramas.
Tres brotes en la primera, tres en la segunda, dos en la tercera, y tres en la trasera.
Y a partir de esos brotes... ramificar para ir formando el árbol.
Pero bueno... eso todavía es soñar mucho...!!
De momento que evolucione... y que los injertos cojan. Que sólo con eso, ya puedo darme por satisfecho para el resto de mi vida bonsayera... je, je, je...
Mayo de 2015:
NaCluT!!!
