5 de agosto'12 Penedèsrutilla, almuerzo ELS MONJOS.
Publicat: dt., 14 ago. 2012, 20:48
Bueno, pues... debiendo dos crónicas como debo, en la recta final que nos llevará a una nueva salidica... me permitiréis la licencia de haber dado un salto cronológico... y que haya "atacado" primero la salida del día 5...
Pues la crónica es más corta que la del día 28... y así, con la tranquilidad de "sólo" deber una, en breve me pongo las pilas... y "ataco" la crónica de la Mussolada...! Je, je, je...
Espero que os guste, companys...!
Penedèsrutilla, almuerzo ELS MONJOS.
El cinco de agosto, teníamos salida… Pero una salida incierta. Pues a pesar de tener clara la rutilla, y que nuestra intención era realizarla para acabar almorzando en la Sede… los amigos del Monterrey nos comunicaron que durante éste mes de agosto cerrarían todos los domingos.
Qué putada…!
Pero bueno. Será sólo durante el mes de agosto… y lo podremos capear con dosis “quita-mono” de cafelitos entre semana… je, je, je…
El caso es que la mañana del cinco, quedamos en la zona de la Girada… con la clara intención de cafetear en cualquier garito que estuviera abierto. Y así, cafeteando… decidir dónde dirigir nuestras burras, en pos de un suculento almuerzo.
Aquella mañana… mi adorada Eolia y yo, montamos en Guillermina y encaramos gratamente la rutilla hasta Vilafranca.
Trayecto tranquilo donde los haya… durante el cual, uno siente la emoción pre-ruta que le arranca en los pirindolos, para luego ir esparciéndose por todo el cuerpo… je, je, je…
Llegamos a la rambla… y ya teníamos allí al amigo Juan! Que nos esperaba con cara seriota, al darse cuenta que ninguno de los garitos que pueblan las aceras de la zona, había abierto sus puertas…
Menuda faena!
Se adivinaba un encuentro pre-ruta sin café…
Luego llegó el amigo Tito. Que en ésta ocasión no subió con nosotros desde Sitges… porque quehaceres domésticos le mantuvieron en casa hasta más allá de la hora de salida. Con lo cual… llegó un poquito más tarde que nosotros. Pero apenas –si me apuráis- unos minutos…
Ahí estábamos charlando… cuando apareció una Intruder 125, negra y reluciente… sin asiento de acompañante, y montada por un tipo con chupa tejana…
Heavy!! O sea, Josep…!!
Que aquél día se estrenaba con las salidas AMICUS… y así pudimos –por fin- ponerle cara y ojos, al nuevo compañero de aventuras. Y que hasta la fecha, sólo conocíamos por el foro…
Bienvenido company…!!!
La verdad… me consta que el estreno le encantó…!Pues ya está deseando repetir… je, je, je…
Y ciertamente, el sentimiento es mutuo. Pues a todos nos encantó el sentido del humor y el cachondeo, que siempre lleva encima nuestro –desde ya- amigo Heavy…
Los siguientes en llegar, fueron Jordicamu600, y Pepe…!
Éste último –encontrándose de guardia- venía dispuesto a echar el cafetín… pero como en ésta ocasión no tuvimos, tuvo que conformarse con la amena charla que llevábamos… allá en la acera de la calle, que cada vez se quedaba más pequeña…
Luego, llegaron los amigos Choppers e Iván. Que a lomos de su dulce montura… llegaban desde Igualada para compartir con todos, ruta, almuerzo, y el más puro de los cachondeos…! Je, je, je…
Y ya estábamos todos!!
Bueno, todos lo que nos íbamos a encontrar ese día… pues lamentablemente –como siempre- algunos de los compañeros no pudieron compartir ésta salidilla de principios de agosto…
Besos, cariños, arrumacos, y abrazos para todos, conforme iban llegando…
…y llegó el momento de decidir dónde ir a menear el bigote! Pues salida sin café… la toleramos. Pero sin almuerzo… je, je, je…
Y fue precisamente el compañero Heavy, quien nos ofreció las exquisiteces que preparan en el bar en el que trabaja su mujer –Luci, a quien conoceríamos en breve-, y a todos nos pareció una idea de lo más apetecible…! Pues así conoceríamos a su señora… Conoceríamos un lugar nuevo donde menear el hocico… Y –lo más importante-, se encontraba lo suficientemente cerca de Vilafranca, como para que Pepe pudiera venir…!
Así que con las ideas claras –en cuanto a ruta y destino se refiere-, decidimos no perder un segundo más… y tras montar el grupo de ruta, iniciarla cuanto antes! Pues las ganas estaban ya… por encima de los límites de seguridad…
Antes, esos sí… acordamos el lugar y el horario con Pepe. Pues encontrándose de guardia como se encontraba… la ruta se la perdería. Pero no el almuerzo…!
Ya que lo organizamos en Els Monjos… y esa localidad –como he comentado antes- entraba en el radio de almuerzos posibles para nuestro compañero…! Ole, ole, y ole…!!
Nos despedimos tristemente de Pepe… y arrancamos con la “Penedèsrutilla” que nos había preparado nuestro Capitán…
Salimos de la capital de l’Alt Penedès… y tiramos –a lomos de nuestra vieja amiga nacional- dirección a El Vendrell.
Pero a la altura de Santa Oliva… pillamos la vieja carretera de Valls. Por la que ruteamos en fila india, metiéndonos por el cruce de La Bisbal.
De allí… tiramos de cara a Sant Llorenç, Sant Jaume del Domenys, La Múnia… y ruteando por esas sinuosas carreteras secundarias, que tanto nos molan… y antes de que nos diéramos cuenta, la rutilla terminaba gloriosa y nuevamente, en Vilafranca.
Y es que… cuando uno se lo pasa bien, el tiempo y el espacio pasan sin pesar. Y la verdad es que la rutilla –en aquél momento- la podríamos haber alargado “in eternum”… je, je, je…
Pero no…!
Los estómagos empezaban a rugir con furia visigoda… y era menester darles algo de yantar! Así que pusimos rumbo a Els Monjos… donde nos esperaba una terracita sandunguera, donde reposaríamos al tiempo que le dábamos a las muelas.
El amigo Heavy, tras la indicación del Capi, se puso en cabeza para guiarnos hasta allí. Y en un periquete, ya estábamos subiendo las motos a la vasta acera… aparcándolas junto a unos olivos que la embellecen.
Luego, nos sentamos en la mesa que ya nos tenían reservada… y una simpatiquísima Luci –esposa de Heavy- nos atendió procurándonos cuanto se nos antojó para zampar…! Je, je, je…
Bocadillotes de salchichas con cebolla… de chistorra… de tortilla, y de lomo… Y hasta un estupendo platico de pollo, huevos fritos, y seques, que se comió Tito… que no se lo saltaba un torero…!!
Al poco de estar allí, con puntualidad británica, llegaba el compañero Pepe a lomos de su VN900.
Tomo asiento… y se dispuso a disfrutar del almuercete con todos…!
Como siempre… cachondeo puro en la mesa, comentando los previos… y disfrutando luego de una estupenda sobremesa.
Luci, siempre atenta… nos procuró sombrillas que –si cabe- nos hicieron más placentera la estancia. Y allí nos tiramos –como quien dice- el resto de la mañana.
Comentando anécdotas… contando chistes… y permitiendo que el recién llegado a la colla –Heavy- conociera una de las facetas más importantes de AMICUS:
La necesidad que sentimos todos, de pasarlo bien y reírnos de todo, cada vez que tenemos la suerte de juntarnos…!
Pero… como comenté antes, refiriéndome a la ruta… el tiempo pierde referencia cuando uno la pasa bien.
Y sin darnos apenas cuenta… ya habíamos pasado peligrosamente el mediodía… y era menester tomar una determinación.
Así que todos a una –en plan Fuenteovejuna- decidimos dar por tristemente finalizada, la salidilla. Y tras ir “retratándonos” con la “dolorosa” de cada cual… nos despedimos cariñosamente unos de otros, preparándonos para la penosa partida…
Y es que, si la salida no tuvo café… la ruta, al terminar para el almuerzo… tampoco tuvo “cervecilla de fin de ruta”.
Con lo cual… nos fuimos abrazando y besuqueando por etapas, despidiéndonos allí mismo. Pues aunque algunos partiéramos en grupo… ya no pararíamos hasta casa.
Allí se quedó el simpatiquísimo Heavy, con su no menos simpática Luci. Que si todo va bien… y me parece que sí… compartirá muchos más encuentros, salidas, y rutillas…!!
Pepe y Jordi a su vez, partieron juntos …
Y por otro lado, Tito, Choppers, Iván, Juan, Eolia, y yo, formamos un grupete de cuatro motos… que cual racimo de uvas, se fue desgranando conforme pillamos los diferentes desvíos.
Y así, finalmente y tras despedirnos de Tito… Eolia y yo arribábamos al parking del que habíamos salido esa mañana, felices. Alegres y orgullosos… Deseosos de que llegue cuanto antes, la próxima aventura de AMICUS!! Oh, yeah…!!!
NaCluT!!!
Pues la crónica es más corta que la del día 28... y así, con la tranquilidad de "sólo" deber una, en breve me pongo las pilas... y "ataco" la crónica de la Mussolada...! Je, je, je...
Espero que os guste, companys...!
Penedèsrutilla, almuerzo ELS MONJOS.
El cinco de agosto, teníamos salida… Pero una salida incierta. Pues a pesar de tener clara la rutilla, y que nuestra intención era realizarla para acabar almorzando en la Sede… los amigos del Monterrey nos comunicaron que durante éste mes de agosto cerrarían todos los domingos.
Qué putada…!
Pero bueno. Será sólo durante el mes de agosto… y lo podremos capear con dosis “quita-mono” de cafelitos entre semana… je, je, je…
El caso es que la mañana del cinco, quedamos en la zona de la Girada… con la clara intención de cafetear en cualquier garito que estuviera abierto. Y así, cafeteando… decidir dónde dirigir nuestras burras, en pos de un suculento almuerzo.
Aquella mañana… mi adorada Eolia y yo, montamos en Guillermina y encaramos gratamente la rutilla hasta Vilafranca.
Trayecto tranquilo donde los haya… durante el cual, uno siente la emoción pre-ruta que le arranca en los pirindolos, para luego ir esparciéndose por todo el cuerpo… je, je, je…
Llegamos a la rambla… y ya teníamos allí al amigo Juan! Que nos esperaba con cara seriota, al darse cuenta que ninguno de los garitos que pueblan las aceras de la zona, había abierto sus puertas…
Menuda faena!
Se adivinaba un encuentro pre-ruta sin café…
Luego llegó el amigo Tito. Que en ésta ocasión no subió con nosotros desde Sitges… porque quehaceres domésticos le mantuvieron en casa hasta más allá de la hora de salida. Con lo cual… llegó un poquito más tarde que nosotros. Pero apenas –si me apuráis- unos minutos…
Ahí estábamos charlando… cuando apareció una Intruder 125, negra y reluciente… sin asiento de acompañante, y montada por un tipo con chupa tejana…
Heavy!! O sea, Josep…!!
Que aquél día se estrenaba con las salidas AMICUS… y así pudimos –por fin- ponerle cara y ojos, al nuevo compañero de aventuras. Y que hasta la fecha, sólo conocíamos por el foro…
Bienvenido company…!!!
La verdad… me consta que el estreno le encantó…!Pues ya está deseando repetir… je, je, je…
Y ciertamente, el sentimiento es mutuo. Pues a todos nos encantó el sentido del humor y el cachondeo, que siempre lleva encima nuestro –desde ya- amigo Heavy…
Los siguientes en llegar, fueron Jordicamu600, y Pepe…!
Éste último –encontrándose de guardia- venía dispuesto a echar el cafetín… pero como en ésta ocasión no tuvimos, tuvo que conformarse con la amena charla que llevábamos… allá en la acera de la calle, que cada vez se quedaba más pequeña…
Luego, llegaron los amigos Choppers e Iván. Que a lomos de su dulce montura… llegaban desde Igualada para compartir con todos, ruta, almuerzo, y el más puro de los cachondeos…! Je, je, je…
Y ya estábamos todos!!
Bueno, todos lo que nos íbamos a encontrar ese día… pues lamentablemente –como siempre- algunos de los compañeros no pudieron compartir ésta salidilla de principios de agosto…
Besos, cariños, arrumacos, y abrazos para todos, conforme iban llegando…
…y llegó el momento de decidir dónde ir a menear el bigote! Pues salida sin café… la toleramos. Pero sin almuerzo… je, je, je…
Y fue precisamente el compañero Heavy, quien nos ofreció las exquisiteces que preparan en el bar en el que trabaja su mujer –Luci, a quien conoceríamos en breve-, y a todos nos pareció una idea de lo más apetecible…! Pues así conoceríamos a su señora… Conoceríamos un lugar nuevo donde menear el hocico… Y –lo más importante-, se encontraba lo suficientemente cerca de Vilafranca, como para que Pepe pudiera venir…!
Así que con las ideas claras –en cuanto a ruta y destino se refiere-, decidimos no perder un segundo más… y tras montar el grupo de ruta, iniciarla cuanto antes! Pues las ganas estaban ya… por encima de los límites de seguridad…
Antes, esos sí… acordamos el lugar y el horario con Pepe. Pues encontrándose de guardia como se encontraba… la ruta se la perdería. Pero no el almuerzo…!
Ya que lo organizamos en Els Monjos… y esa localidad –como he comentado antes- entraba en el radio de almuerzos posibles para nuestro compañero…! Ole, ole, y ole…!!
Nos despedimos tristemente de Pepe… y arrancamos con la “Penedèsrutilla” que nos había preparado nuestro Capitán…
Salimos de la capital de l’Alt Penedès… y tiramos –a lomos de nuestra vieja amiga nacional- dirección a El Vendrell.
Pero a la altura de Santa Oliva… pillamos la vieja carretera de Valls. Por la que ruteamos en fila india, metiéndonos por el cruce de La Bisbal.
De allí… tiramos de cara a Sant Llorenç, Sant Jaume del Domenys, La Múnia… y ruteando por esas sinuosas carreteras secundarias, que tanto nos molan… y antes de que nos diéramos cuenta, la rutilla terminaba gloriosa y nuevamente, en Vilafranca.
Y es que… cuando uno se lo pasa bien, el tiempo y el espacio pasan sin pesar. Y la verdad es que la rutilla –en aquél momento- la podríamos haber alargado “in eternum”… je, je, je…
Pero no…!
Los estómagos empezaban a rugir con furia visigoda… y era menester darles algo de yantar! Así que pusimos rumbo a Els Monjos… donde nos esperaba una terracita sandunguera, donde reposaríamos al tiempo que le dábamos a las muelas.
El amigo Heavy, tras la indicación del Capi, se puso en cabeza para guiarnos hasta allí. Y en un periquete, ya estábamos subiendo las motos a la vasta acera… aparcándolas junto a unos olivos que la embellecen.
Luego, nos sentamos en la mesa que ya nos tenían reservada… y una simpatiquísima Luci –esposa de Heavy- nos atendió procurándonos cuanto se nos antojó para zampar…! Je, je, je…
Bocadillotes de salchichas con cebolla… de chistorra… de tortilla, y de lomo… Y hasta un estupendo platico de pollo, huevos fritos, y seques, que se comió Tito… que no se lo saltaba un torero…!!
Al poco de estar allí, con puntualidad británica, llegaba el compañero Pepe a lomos de su VN900.
Tomo asiento… y se dispuso a disfrutar del almuercete con todos…!
Como siempre… cachondeo puro en la mesa, comentando los previos… y disfrutando luego de una estupenda sobremesa.
Luci, siempre atenta… nos procuró sombrillas que –si cabe- nos hicieron más placentera la estancia. Y allí nos tiramos –como quien dice- el resto de la mañana.
Comentando anécdotas… contando chistes… y permitiendo que el recién llegado a la colla –Heavy- conociera una de las facetas más importantes de AMICUS:
La necesidad que sentimos todos, de pasarlo bien y reírnos de todo, cada vez que tenemos la suerte de juntarnos…!
Pero… como comenté antes, refiriéndome a la ruta… el tiempo pierde referencia cuando uno la pasa bien.
Y sin darnos apenas cuenta… ya habíamos pasado peligrosamente el mediodía… y era menester tomar una determinación.
Así que todos a una –en plan Fuenteovejuna- decidimos dar por tristemente finalizada, la salidilla. Y tras ir “retratándonos” con la “dolorosa” de cada cual… nos despedimos cariñosamente unos de otros, preparándonos para la penosa partida…
Y es que, si la salida no tuvo café… la ruta, al terminar para el almuerzo… tampoco tuvo “cervecilla de fin de ruta”.
Con lo cual… nos fuimos abrazando y besuqueando por etapas, despidiéndonos allí mismo. Pues aunque algunos partiéramos en grupo… ya no pararíamos hasta casa.
Allí se quedó el simpatiquísimo Heavy, con su no menos simpática Luci. Que si todo va bien… y me parece que sí… compartirá muchos más encuentros, salidas, y rutillas…!!
Pepe y Jordi a su vez, partieron juntos …
Y por otro lado, Tito, Choppers, Iván, Juan, Eolia, y yo, formamos un grupete de cuatro motos… que cual racimo de uvas, se fue desgranando conforme pillamos los diferentes desvíos.
Y así, finalmente y tras despedirnos de Tito… Eolia y yo arribábamos al parking del que habíamos salido esa mañana, felices. Alegres y orgullosos… Deseosos de que llegue cuanto antes, la próxima aventura de AMICUS!! Oh, yeah…!!!
NaCluT!!!