El valor de un marido...
Publicat: dg., 20 nov. 2011, 12:35
Tres operarios limpian las ventanas en un edificio muy alto.
Uno de ellos tiene necesidad de ir urgentemente al baño, y decide descender con su silleta hasta la planta baja.
Mientras está en el baño, un viento fortísimo azota el edificio y hace precipitar al vacío a sus dos compañeros, quienes se estrellan contra el pavimento.
Esa misma noche, nuestro amigo, que no tiene consuelo por lo ocurrido, acude con su esposa al velorio de sus compañeros y trata de dar ánimo a las viudas... pero no encuentra suficientes palabras de aliento.
De pronto irrumpen en la sala de velación dos señores muy circunspectos, que preguntan por las viudas; se dirigen a ellas y les dicen:
- "Señoras: el seguro previsto por la empresa les otorga una indemnización por estos lamentables siniestros... Se trata de un cheque por 1.000.000 de euros para cada una de ustedes. Tengan los cheques, y reciban nuestras más profundas condolencias."
La esposa de nuestro amigo, mira anonadada la escena... Se dirige a su marido, y le dice:
- "¡Claro! ¿Y el señorito...? ¡¡¡¡¡Cagando!!!!!
NaClu2!!!
Uno de ellos tiene necesidad de ir urgentemente al baño, y decide descender con su silleta hasta la planta baja.
Mientras está en el baño, un viento fortísimo azota el edificio y hace precipitar al vacío a sus dos compañeros, quienes se estrellan contra el pavimento.
Esa misma noche, nuestro amigo, que no tiene consuelo por lo ocurrido, acude con su esposa al velorio de sus compañeros y trata de dar ánimo a las viudas... pero no encuentra suficientes palabras de aliento.
De pronto irrumpen en la sala de velación dos señores muy circunspectos, que preguntan por las viudas; se dirigen a ellas y les dicen:
- "Señoras: el seguro previsto por la empresa les otorga una indemnización por estos lamentables siniestros... Se trata de un cheque por 1.000.000 de euros para cada una de ustedes. Tengan los cheques, y reciban nuestras más profundas condolencias."
La esposa de nuestro amigo, mira anonadada la escena... Se dirige a su marido, y le dice:
- "¡Claro! ¿Y el señorito...? ¡¡¡¡¡Cagando!!!!!
NaClu2!!!