Esto es un misionero que está en plena selva, y se encuentra de bruces con un león que estaba casi muerto de hambre.
El misionero -cagaíto de puro miedo- y se pone de rodillas, y temblando, empieza a rezar:
- Padre, infunde a éste pobre león sentimientos cristianos...!
Se oye un silencio... y de buenas a primeras el león se pone de rodillas, diciendo:
- Padre, bendice éstos alimentos que voy a recibir...
NaClu2!!!