Pero de momento... ya tengo lista la del pasado 11 de marzo!
Espero que os guste...
Regreso a l'Antiga Masia. IGUALADA.
A mediados de diciembre pasado, se cumplieron tres años de la primera –y única- vez que hemos almorzado en “L’Antiga Masia”.
En todo ese tiempo, ha habido –por lo menos- dos intentos infructuosos de volver a almorzar allí… pues la verdad es que se almorzaba bien, y sobretodo barato.
Pero como no hay dos sin tres… el pasado once de marzo volvimos a la carga, dándonos de bruces con una puerta más cerrada que el culo de un delfín.
Aquella mañana habíamos acordado salir de la Sede a las ocho y media… con intención de almorzar en el mencionado local, y seguidamente regresar al Monterrey a echar la cervecilla “fin de ruta”.
Realizando así una salidilla tranquilota…
Sin demasiada ruta…
Pero con los elementos básicos para pasarlo bien:
Los amigos, las burras… y un buen almuercillo…!
Once marzo. Y aunque el sabio refranero español reza que “hasta el cuarenta de mayo no te quites el sayo”… un servidor decidió –aprovechando que parece que va llegando el buen tiempo- salir de casa sin ponerse las acostumbradas prendas de “protección invernal”.
Así que sin los pantalones, ni camiseta térmica… salí un poco antes de las siete, con la sana intención de despertar a mi incansable compañera Guillermina... y en su lomo, darme una vueltecilla antes de llegar al bar de nuestros buenos amigos Pedro y Victoria.
Y si bien es verdad que la mañana estaba más frescuela de lo que a priori cabía esperar… No es menos cierto que me lo pasé “teta” recorriendo el trayecto hasta el punto de encuentro… viendo desde mi asiento, cómo empezaba a clarear el nuevo día…
Llegué cuando faltaban apenas dos minutos para las siete y media. Y como –obviamente- no había llegado nadie todavía… me dispuse a echar el carajillo en la terraza, mientras leía el periódico.
Gigante placer donde los haya…!
Pues sentadito en la terracilla, leyendo el diario, echando el pitillo, sin prisas de ningún tipo, y sin necesidad de hacer otra cosa que no sea lo que se está haciendo… uno se siente –hablando en plata- de putísima madre…!! Je, je, je…
Cumpliéndose las ocho del día, no tardaron en llegar los compañeros que estaban apuntados en la lista de semejante excursión:
Pepe, Pitu y su hijo Borja... K-RloteS, Jordicamu600... Señores de Barón, Juan, y Jordi883...
Estábamos todos, a falta sólo de Choppers y Montse -con quienes nos encontraríamos en Igualada...
...y los compañeros de Cheyennes. Que como nos comentaron, llegarían al punto de la salida.
Cafeteamos tranquilamente, petando la charlita... disfrutando de los emocionantes momentos previos a cualquier salida. Y por supuesto... festejando la estampa inefable que nos ofrecía Jordi con ese pedazo de Hipo en la espalda...!
Era la primera salida con colores que hacía nuestro amigo!! Y no fue poca la ilusión que sentimos todos cuando se dio la vuelta, y aparecieron nuestros queridos colores...!! Je, je, je...
Qué alegría. Qué orgullo... Y qué satisfacción infinita...!!
Llegando la hora de la salida... nos fuimos preparando para la ruta. Y justo en esos momentos... llegaban Blas, Diego, y un par de compañeros más de Cheyennes.
Con el tiempo justo de saludarnos afectuosamente. Preparar el grupo de ruta... y salir raudos, poniendo rumbo a la capital de L'Anoia.
En ausencia de nuestro Capitán -que en ésta ocasión, no pudo acompañarnos-, ocupé su lugar "guiando" al grupo... y como antaño, y para no perder las buenas costumbres... di muestras de orientación "zapatera", queriendo salir de Vilafranca por donde no era... je, je, je...
Y es que me fui por donde siempre... sin acordarme que había habido cambios en las carreteras.
Pero bueno, nada que no solucione un giro a tiempo en una rotonda... y volvimos al camino como quien no quiere la cosa.
La subida fue tranquilota y sin prisas.
El grupete, cual serpiente multicolor... fue subiendo por el grisáceo camino, devorando uno a uno, cada uno de los kilómetros que nos separaban de nuestro puerto de arribada.
Y aunque por la mañanica se notara cierto fresquete... ya os puedo asegurar que a medida que nos acercábamos a nuestro destino, el "fresquete" se tornó frío...! Pero frío... frío...!!
Y es que nunca hay que despreciar al sabio consejo del viejo refranero...
Justo después de cruzar el polígono industrial... divisamos el carro de la azotea del restaurante!!
Ole, ole, y ole...!! Ya habíamos llegado...!!
Y debajo... con la ilusión en las miradas... descubrimos a nuestros grandes amigos igualadinos: Choppers y Montse!
Que nos esperaban... con una triste noticia:
El restaurante estaba cerrado!!!
Tras aparcar las burricas, les dimos los acostumbrados -y deseados- besotes y arrumacos... que siempre nos damos cuando nos encontramos con los amigos. Y justo después de ellos... pudimos ver con nuestros propios ojos que su noticia era cierta...
... y el restaurante estaba cerrado. Pues no abriría hasta las doce del día...
Vaya tela...!!
Otro infructuoso intento de almorzar allí, que se iba al garete al encontrar las puertas más cerradas, que el puño de un avaro...
Allí estuvimos echando el pitillo... charlando entre nosotros... mientras esperábamos la llegada de Escacs, que llegaría después de ir a buscar a Jack Custom y su encantadora esposa... acompañado de una nueva parte de Cheyennes.
Y a su llegada, después de los besotes y cariñitos de rigor... Escacs dio con una solución al problema:
Ir a almorzar al bar de su sobrina... en Vilanova del Camí...!
Así que allí nos quedamos esperando el resto, mientras Escacs salía raudo hacia el bareto, para asegurarse que no nos pasara como allí...
Pero apenas diez minutos más tarde, volvía triunfante -a lomos de su burrica- para llevarnos a todos hacia allí.
Mientras esperábamos... recibimos la visita de los amigos Lacetanis! Que por lo visto se habían dado cita en la gasolinera de al lado... y cual no fue la sorpresa de todos, al encontrarnos en las casuales circunstancias que sólo las motos saben generar...
Una vez tuvimos a Escacs entre nosotros, arrancamos el grupete -que crecía por momentos- y salimos como alma que persigue el diablo... hacia Vilanova!
Entramos en el pueblo... y guiados por Escacs, fuimos recorriendo calles, hasta llegar frente a un colegio... donde aparcamos -una a una- nuestras monturas.
Ya habíamos llegado!!
Pero... y el bar?! -Nos dijimos para nuestros adentros...
El bar se encontraba justo al final de una caminata -que se nos hizo eterna-, pues el amigo Escacs nos dijo que frente a él no había posibilidad de aparcar.
Así que armados de paciencia, y con más hambre que el perro del afilador... le fuimos siguiendo hasta llegar al bareto que nos tenía que llenar las tripas...
Y llegamos!
Vaya si llegamos!!
Y en un periquete... nos encontrábamos pidiendo bocadillos... platos combinados... y toda clase de viandas que nos ofrecieron los sabios responsables del mostrador.
Qué hambre compañeros!!!
Un ratillo más tarde... después de echar unos pitillos en las puertas del local, y tras echar las charlitas más dispares, por fin pudimos sentarnos en la mesa a comer...! Je, je, je...
Yo me "empujé" un hermosote bocadillo de bacon con queso... que me duró un suspiro. Y justo estaba yo relamiéndome los dedorros del placer, cuando Jordi me propuso compartir un platico de pinchos, que acompañaríamos con "piparras"...!
Hermoso palabrejo, que dejó alucinado a Barón cuando descubrió que lo conocía... je, je, je...
Allí le fuimos dando al buche... charlando cada vez menos, y masticando cada vez más.
Llenando tripas y tripones... y haciendo hondo honor, a la segunda parte de nuestro lema: "tragones"...!!!
Llegando así a la hora de los cafelotes... del fin de almuerzo, y de la hora de partir.
Digo "de la hora de partir", porque esa salida la propuse comentando que iba de tarde... y me era menester regresar pronto, para tener tiempo de cervecear en la Sede... y llegar a casa a una hora prudente.
Y después de todo el "tiempo perdido" en el restaurante cuyas puertas seguían cerradas... no era cuestión de "dormirse en los laureles".
Y menos, después de haber avisado al amigo Pepe... de nuestra inminente llegada!
Pues Jordi le dio el "toque" vía móvil... y seguro que nos esperaría en la terracica del Monterrey.
Así que liquidamos cuentas... y nos dispusimos a recorrer de nuevo la distancia que nos separaba de las burras...
Llegamos allí, y todavía tuvimos tiempo de echar una "sesión fotográfica" con los amigos Cheyennes... inmortalizando el acto.
Fotos de grupo... Fotos panorámicas, y personalizadas...
Pero no tardamos en arrancar motores, para montar -de nuevo- el grupete de ruta.
Y uno a uno, nos fuimos colocando justo detrás de Escacs -que nos sacaría de allí- con el fin de ir deshaciendo el grupo a medida que saliéramos del pueblo.
Y llegó el que fue -si cabe- el momento más triste de la jornada...
Pues Jordi883, se cayó de su estupenda Harley...!!
El mal estado del asfalto, junto a una patinada de embrague... le hicieron rebrincar, dando con sus huesos en el suelo.
Rompiéndose la maneta del embrague... Pegándole ostia a la estribera izquierda de las defensas... Y rallándose -un poquito- el lateral zurdo del depósito.
Por fortuna... los daños físicos de nuestro amigo, fueron prácticamente nulos. Y los de la burra... se pudieron reparar a lo largo de la semana siguiente...
Pero los daños morales, como el susto... es algo que queda...
Pero bueno. Mal que nos pese... y como se ha comentado en infinidad de ocasiones, éstas son cosas que pasan. Y si pasan así... uno ya se puede dar con un canto en los dientes...!
Desde aquí, amigo mío... muchos ánimos!!
Que si todo el mundo se debe caer -cuanto menos- una vez en su vida... Tú ya lo has hecho.
Con resultados bastante benignos... y sin llevar a nadie!
Que eso es lo más importante...
Una vez repuestos del susto... reorganizamos el grupete, y salimos de allí.
Los primeros en separarse del mismo, fueron los amigos Choppers y Montse... a quienes reclamaban atenciones familiares.
Así que les despedimos... hasta la próxima!!
Luego, fueron Cheyennes. Que al llegar al desvío de la C15 -hacia Vilafranca-, siguieron rumbo mientras nosotros virábamos hacia la capital de l'Alt Penedès.
Nos vemos, compañeros...!! Hasta pronto!!
Y así... emprendimos el camino de regreso, recorriendo idéntica ruta a la de ida, pero en sentido inverso...
Poniendo -nuevamente- a prueba, mi ausente sentido de la orientación... je, je, je...
Menos mal que al llegar a la altura de Vilafranca, me la jugué al elegir la entrada. Y aunque hasta el último momento no respiré tranquilo... elegí la que nos llevaría directamente hasta la Rambla de la Girada! Al Monterrey...!!
Donde nos esperaba una grata sorpresa, al descubrir que no sólo nos aguardaba Pepe... si no también Mary...!! Su encantadora y simpatiquísima esposa!!
Ole, ole, y ole...!! Je, je, je...
Y así fue como llegamos de nuevo a nuestra Sede... donde después de saludar calurosa y cariñosamente -como es debido- a nuestros amigos, nos dispusimos a echar una cervecilla de "fin de ruta"... mientras comentábamos la salida. Los incidentes... Y todos los gratos momentos vividos...
Lástima que el tiempo me apretaba los pirindolos... y no tardé demasiado en verme obligado a despedirme de los compañeros...
Pues entraba de tarde... y me tenía que dar tiempo a ducharme, comer algo, y salir zumbando para el currelo.
Así que todos al unísono -en plan Fuenteovejuna-, dimos por terminado el encuentro... despidiéndonos hasta la próxima salida.
Que como comentaré en la siguiente crónica que os debo... fue un verdadero placer en todos los sentidos...!!
Oh, yeah...!!!
NaClu2!!!
