Escapadita a l'Anoia... IGUALADA.
La salida del pasado diez de mayo… fue una de esas salidas que un propone “simplemente” porque libra, y le apetece salir a gastar un poquitín de caucho…
De hecho, la propuesta primigenia fue un cafetín en la Sede. Pero precisamente al caer en la cuenta que mi menda lerenda libraba ese día… me decidí a proponer una salida con el ánimo de juntar un poco de colla… o –en su defecto- echarme una rutilla con mi media naranjuela.
Que siempre es un gustazo salir en pareja a devorar asfalto…
…y lo hacemos en muy contadas ocasiones…
Para la primera hora del día, propuse que por la mañana –si todo cuadraba bien- se podía ir a ver jugar -a básquet- al simpatiquísimo Aitor. (Que seguro que le dábamos una buena y emocionante sorpresilla…!)
Pero lamentablemente, el viejo Murphy sacó pecho… y ese día -el mayor de Pepe y Mary- no jugaba…
Con lo cual, guardamos la idea en el capítulo de “pendientes”… y el día que podamos cuadrarlo, AMICUS Moto Grupo irá a darle ánimo en uno de sus partidos…!!
Esto desmontaba la primera parte de la salida… pues la segunda estaba clara:
Subiríamos a Igualada -con la intención de aprovechar que era sábado-, e iríamos con la colla a zampar algo al Bar “Can Jaume”.
Un barecillo al que nos llevó Sindo hace unos años… y donde hacen un pulpo a la plancha que quita el sentido…!
Así las cosas… decidimos que por la mañana mantendríamos el horario de la salida. Y a pesar que –lamentablemente- no se había apuntado nadie a la ruta… Eolia y yo saldríamos –sin rumbo fijo- dispuestos a meternos un periplo que terminara –a eso del mediodía- en la capital de l’Anoia.
Pero aquí el viejo Murphy volvió a sacar pecho… y dio al traste con la ruta mañanera. Pues mi adorada Eolia pilló un orzuelo en el ojo anarca… y cuando le dieron la pomada milagrosa que le iba a quitar la molestia, le aconsejaron “poco sol”, y “nada de aire”.
Con lo cual, salir de mañana –con el fresquito mañanero- a devorar kilómetros como posesos… no parecía la mejor de las ideas.
De tal modo… que decidimos aprovechar que nadie más se había apuntado a la ruta, para anularla. (Al menos la primera parte…)
Y como las amigas Conxi y Roxie se habían apuntado a un almuercete en la Sede, para ir a buscar –de paso- las camisetas encargadas en Ammaerografía… Nos sumamos al almuercete con la idea de salir –a eso de las once y algo- dirección Igualada… y hacernos –si cabe- una pequeña rutilla de pareja.
Y eso hicimos…!!
Por la mañana, celebramos prácticamente la idea primigenia para el día…! Pues hicimos lo mismito que en cualquier cafetín en la Sede… je, je, je…
Nos juntamos en “nuestra mesa”, y entre risas y chanzas… nos empujamos para dentro unos buenos bocadillazos de esos que prepara Pedro…
Con Roxie y Conxi, disfrutamos de un almuercete guasón… que –como todos- culminó con la negra guinda de la botella de licor de café presidiendo la mesa…!!
Sólo que en ésta ocasión, sólo llenó una vez mi vaso…
…pues en breve, teníamos que salir para tierras de l’Anoia. Y no era cuestión de salir cantando el porompompero… je, je, je…
A las once y cuarto pasadas… nos despedíamos de nuestras amigas en la puerta misma del local de Alfredo… al tiempo que saludábamos a Juan Ninja…! Que en esos momentos se acercaba a la Sede.
Besos y abrazos… y hasta la próxima, companys…!!
Tras calentar someramente el aceitillo de las tripas de Guillermina… salimos -los tres- de la rambla de la Girada. Y tras un ligero paso por la N340… enfilamos la C15 que nos llevaría -raudo cual relámpago- a nuestro destino.
A muy buen ritmo… fuimos zampándonos todos y cada uno de los kilómetros que tuvieron la osadía de ponerse frente al mascarón de Guillermina…!
Uno tras otro… pasaron bajo sus poderosas gomas, que ese día estaban especialmente hambrientas…
Así que cuando llegamos al punto de encuentro –que por no variar, era el bar Avinguda-, dejamos a Guillermina estacionada en el lugar de costumbre, donde reposó como si de un grácil corcel –amorrado al abrevadero- se tratara…
…y nos dispusimos a echar un cafetín, mientras esperábamos a nuestros amigos Choppers y Montse.
El primero en llegar –sobre su jaca- fue Sindo. Que se sentó con nosotros… y dejamos el café, para parar al tercio de los “champús”… je, je, je…
Y al poco, llegó Montse. Que ese día estaba un poco liada con la comida familiar en la que celebrarían su inminente cumpleaños…!!
Desde aquí –un vez más- felicidades, guapísima…!!
Echamos un ratillo charlando… y luego de dar finiquito a los zumitos de cebada y limón… nos despedimos de Montse –que como digo- ese día tenía tareas domésticas importantes.
Y con Sindo… decidimos ir a ver arbitrar a David…! Que el pasado sábado se estrenaba… como árbitro de básquet…!!
Así que arrancamos motores, y nos fuimos para allá… donde le vimos “pitar” el segundo partido de su vida…
Pues el primero lo había mediado a eso de las once de la mañana.
Qué grandote está…!!
Y qué orgullosos su papi… viéndole “imponer el orden” en el partido… je, je, je…
Luego ya… con Eolia decidimos que el tema de ir a “Can Jaume” –siendo nosotros solos- lo íbamos a obviar, dejándolo para otra ocasión en que podamos compartirlo con la colla.
Y que iríamos a zampar algo, allá donde nos diera “el punto”… tomando la ruta de regreso.
Así que nos despedimos cariñosamente de Sindo… (De David no, porque fue terminar el partido… nos saludamos… y salió echando chispas…! Je, je, je…) …arrancamos las burricas, calentamos motores… y nuestro Sargento nos llevó a buscar la C15, al tiempo que nos despedíamos hasta la siguiente ruta…!
Hasta la vista, company…!! Nos vemos el diecisiete…!!!
Eolia y yo… bajamos camino de Vilafranca. Pero –imagino que por el comentario de la posibilidad de parar allí- al descubrir el cartel que te indica la salida para Sant Quintí de Mediona… mi menda lerenda puso el intermitente, y pusimos rumbo al “Gabiretxe”…!!
El barecillo donde fuimos a almorzar el año pasado, después que en agosto lo encontráramos cerrado.
Un bar simpático… donde me hicieron un pepito de ternera con pimiento… que no veas cómo entraba! Je, je, je…
Qué a gusto se estaba en la terracita… donde corría una brisa placentera…!!
Comimos… y ya luego, deliberamos entre prorrogar la ruta, o tirar para casa…
…pero nos acordamos de Sara –nuestra perrita- que estaría deseosa de salir a “vaciar”…
Nos acordamos del orzuelo –que ya no molestaba gracias a la pomada- pero estaba ahí. Junto a las indicaciones facultativas que nos habíamos pasado por “los cilindros”…
Así que decidimos dar por terminada la salida, y volvimos para casa.
Felices, por la estupenda salida disfrutada… que terminaría –felizmente- disfrutando el resto de la tarde en casa…
…donde desde entonces, esperamos pacientemente la próxima ocasión para gastar caucho, devorar kilómetros, y mover los bigotes…!! Je, je, je…
Oh, yeah…!!!
NaCluT!!!
